Una corta y para nada fulgurante carrera... Hasta siempre

Sí, (h)amigos y (h)amigas... Tras unas circunstancias que me están hundiendo más y más, creo conveniente parar con este blog.

Supongo que más o menos ya os hacíais una idea los que me conocéis... No puedo seguir con esto por el simple hecho de que si posteara tal y como estoy rompería una promesa que me hice a mí mismo: no hablar de nada doloroso ni que me comprometiera. Como veis, es una promesa bastante simple y fácil de digerir.

Quise abrir este blog para compartir mis chorradas, sin más ánimo que compartir mi pequeño mundillo con quien le pudiera interesar... Pero hoy por hoy ese mundillo se convertiría en un programa de cotilleo que no le interesa a nadie.

Llevo ya un tiempo que no estoy para nadie: he cerrado el messenger, sólo me he puesto en contacto por móvil con un (h)amigo para felicitarle su cumpleaños (por cierto, estoy haciendo apuestas conmigo mismo por comprobar cuántos se acuerdan del mío) y ya está; y así estoy mejor. Incluso he cancelado la celebración de mi próximo cumpleaños, simplemente por falta de ganas, de motivación y de querer limpiar la casa después de que todo el mundo se pire borracho y habérselo pasado infinitamente mejor que yo.

Por último, muchas gracias sobre todo a Ghanima Atreides por todo el soporte técnico a la hora de poner esto en marcha y a Montse Akane por sus pequeños y valiosos consejos en cuanto al diseño. También a los lectores y a los que en algun momento habéis comentado algo. Me hubiera gustado saber algo más de vosotros.

Cuidáos mucho, y sobre todo guardáos de la familia.

Hasta siempre,
Jach